Miembros de partido político Camino Cristiano de Guillermo Osorno, denunciaron a través de una conferencia de prensa las irregularidades que cometieron los fiscales Sandinistas en las Juntas Receptoras de Votos el pasado siete de noviembre, dos días después de formar parte del fraude electoral en el que nuevamente entregaron el poder a Daniel Ortega.
Osorno, denunció que sus votos fueron robados y según un conteo el partido estaba por debajo del Frente Sandinista.
Entre las irregularidades constatadas, es que la mayoría de los fiscales a nivel departamental solamente eran del FSLN y de Camino Cristiano.
Además, señalaron que los fiscales de las JRV le indicaban a las personas en que casilla debían de votar, actos proselitista a favor del Frente Sandinista, adulteraban los votos después de ser depositados, asistencia de personas no acreditadas por el CSE, asistencia de paramilitares.
Cabe señalar, según información recibida a BTN Noticias, el abstencionismo ciudadano rondó hasta un 89% que dijeron No al Voto, porque “dedo limpio, conciencia limpia”.
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El partidario, solicitó públicamente al dictador Daniel Ortega que en 2022 realizaran nuevamente las elecciones presidenciales y parlamentarias de forma legal, pues asegura que los fiscales Sandinistas “empañaron el proceso” al adulterar las actas, puesto que el 10% de los que participaron de los comicios, fueron empleados públicos obligados a manchar su dedo.
El partido Camino Cristiano ha sido señalado de ser un colaboracionista al règimen Sandinista por su abierta y cercana relación, participando en eventos públicos organizados por FSLN, además por su evidente silencio a las irregularidades y crímenes cometidos por la dictadura; pero él asegura que todas esas acusaciones son “falsas y malintencionada”.
Camino Cristiano, al igual que los demás partidos “zancudos”, se prestaron al juego de la dictadura, manchando su dedo con la sangre de los asesinados en abril 2018, al participar como la supuesta “oposición” del país, cuando la verdadera oposición está encarcelada desde mayo pasado.
Estos nueves partidos colaboracionistas que participaron en el fraude electoral, con conjunto con el CSE, entregaron el poder por cuarta vez consecutiva a la dictadura Sandinista de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Guillermo Osorno, fue una de las voces que se unían al llamado desesperado de los Sandinistas a la población a que formaran parte de la burla electoral.