La dictadura Sandinista de Daniel Ortega condenó la expulsión de Rusia del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas por su invasión a Ucrania, a pesar que este había dado su respaldo de condena a la ofensiva y asesinatos en el país del este.
“Toda acción dirigida a excluir o suspender la participación de los países y de sus Gobiernos en los diferentes organismos internacionales constituye una violación a los derechos humanos y una agresión a sus pueblos, violatoria del derecho internacional, incompatible con la Carta de las Naciones Unidas”, dijo el títere de la dictadura, Denis Moncada, Ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua.
Dictadura Sandinista le da la espalda a Putin y condena la guerra contra Ucrania
La Federación Rusa fue expulsada el pasado 7 de abril 93 votos, 24 en contra y 58 se abstuvieron.
Hasta el momento la dictadura Sandinista se había mantenido al margen sobre la ofensiva rusa contra Ucrania y en cada resolución el régimen se abstenía de votar y hablar en contra de la supuesta “operación militar especial” de Vladimir Putin.
Fue hasta el pasado 23 de marzo que la dictadura Sandinista de Ortega extrañamente cambio de posición, al enviar un comunicado a la Organización de Estados Americanos en el que le solicita al organismos ser incluido en la declaratoria de condena a la invasión rusa contra Ucrania.
Arturo Mcfields se le voltea a la dictadura Sandinista y denuncia a Ortega ante la OEA
El cambio de posición fue una cortina de humo para desviar la atención de lo ocurrido ese mimo día, en el que el embajador de Nicaragua ante la OEA, Arturo Mcfield denunciara al régimen las violaciones a los derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad.