Este jueves se conoció que el gobierno de Estados Unidos sancionó al ex presidente de Panamá, Ricardo Martinelli (2009-2014), al vicepresidente de Paraguay, Hugo Velázquez, y al exmandatario del país Horacio Cartes por actos de corrupción.
En el caso de Martinelli, fue acusado de estar involucrado en “corrupción a gran escala” que socavaron la “integridad de las instituciones democráticas de Panamá” durante su mandato.
Según el secretario de Estado de Estados Unidos, el expresidente aceptó sobornos a cambio de blanquear millones de dólares en el caso de la constructora brasileña Odebrecht, el mayor episodio de corrupción en la historia del país.
En el proceso de blanqueo, Martinelli involucró a sus hijos Ricardo Alberto y Luis Enrique, que fueron los encargados de realizar “pagos en sobornos hechos por y bajo la dirección de Odebrecht” por un total de 28 millones de dólares.
Los hijos de Martinelli fueron capturados en el Salvador en 2020 y luego enviados a Estados Unidos para responder a una demanda por corrupción y blanqueo.
Sin embargo, este mismo jueves se conoció que los hermanos fueron excarcelados tras cumplir una condena de 2 años, para ser entregados a la justicia panameña tras ser imputados por otro escándalo de corrupción conocido como “Blue Apple”.
Las sanciones incluyen que ni Martinelli ni su familia podrán ingresar a tierra estadounidense, y a consecuencia de esto, no podrá postularse para las presidenciales en 2024.
Así mismo los exmandatarios Hugo Velázquez, vicepresidente y al exmandatario de Paraguay Horacio Cartes (2013-2018), fueron incluidos en la lista de las personas más corruptas por socavar las instituciones democráticas del país.
Según describió el Departamento de Estado de Estados Unidos, Cartes es uno de los “individuos más ricos” de Paraguay y aseguró que durante su Gobierno cometió actos de corrupción, incluyendo sobornos a funcionarios y legisladores.
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De igual manera, Velázquez es acusado de tráfico de influencias y sobornos al “interferir en procedimientos judiciales con el objetivo de protegerse a sí mismo y a otros socios criminales de cualquier investigación y ha amenazado a aquellos que podrían exponer su actividades criminales”.
Ambos exmandatarios tienen restringidas la entrada a Estados Unidos y a sus familiares, asi como el congelamiento de todos sus bienes en el país norteamericano.