El Ministerio del Interior de Perú prohibió la entrada al país al expresidente y dictador de Bolivia, Evo morales.
El gobierno de Perú señaló a Morales de ser una “amenaza a la seguridad Nacional” y al orden interno por inmiscuirse a los asuntos internos de la nación.
La administración peruana manifestó que el país es “soberano y democrático, cuyo ordenamiento migratorio establece que todo ciudadano extranjero en el territorio nacional tiene el deber de conducirse cumpliendo el ordenamiento jurídico, en especial en lo referido a la seguridad nacional y el orden interno”.
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En ese sentido, refirieron que en los últimos meses han identificado a nueve ciudadanos bolivianos a “efectuar actividades de índole política proselitista, lo que constituye una clara afectación a nuestra legislación migratoria, a la seguridad nacional y al orden interno del Perú”.
A estos nueve ciudadanos, incluyendo a Morales, les fueron negada la entrada al país.
El expresidente Boliviano ha sido uno de los principales críticos del nuevo gobierno luego de la destitución de Pedro Castillo como presidente de Perú, aduciendo que le dieron un golpe de estado.