Cuarenta extranjeros de distintas nacionalidades murieron calcinados en un centro de detención de migrantes en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez, en el norte de México la noche de este lunes.
Un video que fue publicado por medios opositores al gobierno del presidente comunista Andrés Manuel López Obrador, se logra observar el momento exacto en que una de las celdas del centro de detención está prendida en llamas, mientras que uno de lo detenidos intenta derribar el portón que estaba enllavado.
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Dentro de la celda se encontraban dos oficiales que no hicieron nada por salvar la vida de los que estaban dentro del recito migratorio, mientras las llamas se propagaban por todo el lugar.
El área calcinada fue una zona de dormitorios donde “estaban alojados 68 hombres mayores de edad originarios de Centroamérica y Sudamérica”.
El centro de detención de inmigrantes tenía alojado a 68 transnacionales, saltando su capacidad que es de 60 personas. De los 68 migrantes, solo 28 sobrevivieron y fueron llevados 4 centros hospitalarios de la ciudad para ser atendidos.
El presidente izquierdista de México, Andrés Manuel López Obrador atribuyó la desgracia a una supuesta protesta que habían realizado los migrantes luego de enterarse que iban a ser deportados a sus países.
“Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron de iban a ser deportados, movilizados, y como protesta, en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego, y no imaginaron que esto iba a causar esta terrible desgracia”, dijo López Obrador en conferencia la mañana de este martes.
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El mandatario confirmó que los fallecidos corresponden a transnacionales centroamericanos y venezolanos, pero se están poniendo en contacto con las embajadas de esos países para identificar a sus ciudadanos.