Un amigo de la familia cercana de los productores musicales de Saxo Producciones, Salvador Espinoza y su esposa Xóchitl Tapia secuestrados por la Policía Sandinista este 12 de abril, relató los momentos de horror que vivieron durante su detención.
La denuncia publicada en redes sociales, relata que Salvador Espinoza, su esposa Xóchitl Tapia y su hijo de cinco años, habitantes de una humilde casa, se encontraban refrescándose en una piscina cuando fueron interceptados por la Policía Sandinista que irrumpieron en el lugar de forma brutal.
Cuenta que durante su secuestro Martínez fue brutalmente golpeado por sus verdugos y luego fue montado, junto con su esposa, en una camioneta estatal con rumbo desconocido.
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Minutos antes de ser llevados, la Policía arrebató al niño de las manos de sus padres y fue entregado a una vecina que habita cerca de la casa de los productores, con todo y ropa mojada.
Según el relato, vecinos de la localidad salieron de sus casas para intentar ayudar a los secuestrados, pero fueron amenazados por paramilitares que portaban armas de alto calibre y les gritaron “métanse a sus casas”.
Ante la impotencia de no poder hacer nada y el temor de ser asesinados, se regresaron a sus hogares.
La casa de los productores musicales luego de ser allanada y destrozada, pasó en vigilancia por varias horas por los secuaces al servicio de la dictadura Sandinista.
Martínez y Tapia fueron secuestrados al igual que los miembros de la banda musical Monroy & Sumernage este 12 de abril, seis días antes del cuarto aniversario de la insurrección civil de 2018.
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Los músicos fueron detenidos por interpretar música alusiva a las rebelión civil de 2018, es decir, la dictadura Sandinista no quiere acordes musicales que les recuerde que tienen las manos manchadas de sangre de niños y jóvenes que protestaron de forma pacífica en 2018.
Entre el lunes y martes santo fueron detenidos al menos 11 opositores al règimen Sandinista.