La Policía Sandinista continúa el hostigamiento y persecución contra líderes religiosos y, en este caso le tocó el turno a Monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de la diócesis de Matagalpa.
El obispo denunció que la Policía Sandinista lo persiguieron durante todo el día de este jueves. Al momento de cuestionarles sobre el porqué del hostigamiento, estos respondieron que era por su “seguridad”.
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Monseñor Álvarez, se dirigiría en casa de sus familiares, momento en el que los agentes ingresaron a la propiedad “poniendo en riesgo la seguridad de mi familia”.
Ante el hostigamiento y persecución a su persona, el religioso se refugió en la iglesia Santo Cristo de Esquipulas, liderado por Monseñor Calos Avilés, para evitar ser capturado.
En forma de protesta, Monseñor Álvarez anunció que estará realizando un ayuno de agua y suero de forma indefinida hasta que la Policía Sandinista a través del presidente de la Conferencia Episcopal, le hagan saber que van a respetar su círculo familiar y también su seguridad.
Así mismo, invitó a la feligresía católica a que se unan en ayuno, oración y vigilia para rezar por su integridad.
“Estaré elevando mis súplicas al señor para que cese este hostigamiento durísima y cruel para todos nosotros”, clamó.
Luego que el Parlamento Sandinista aprobara una iniciativa en la que exige reformas a la Ley contra el terrorismo, en donde imponen pena de cárcel contra obispos de la iglesia católica, la dictadura Sandinista ha desatado una casería contra ellos.
Asedio y arrestos en iglesia San Juan Bautista de Masaya
Hasta el momento, agentes policiales y paramilitares mantienen en total vigilancia al padre Edwin Román, Harving Padilla de Masaya, Uriel Vallejos, párroco de la iglesia Divina Misericordia, en Matagalpa y este jueves se unió Monseñor Álvarez.