Luego que el presidente de Finlandia, Sauli Niinistö le comunicara a Vladimir Putin su decisión de adherirse a la OTA, este tomó represalias y cortó el suministro eléctrico que Rusia le compartía.
Niinistö le explicó a Putin que sus decisiones deliberadas de invadir Ucrania y su evidente amenaza al mundo que se han apostado en su contra, resulta una amenaza para la seguridad de Finlandia.
De este modo, la madrugada de este sábado la compañía energética Inter RAO de Rusia, canceló la venta del suministro por supuestos “problemas para recibir los pagos de la electricidad vendida”.
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De acuerdo con las autoridades finlandesas, Rusia importaba un 10% de su electricidad, lo que significa que la medida no impactaría de manera negativa en los suministros energéticos de todo el país.
El que realmente se vería afectado es Rusia, pues es un porcentaje que energía que no estaría colocando y más en un país como Finlandia, pues era uno de sus principales clientes históricamente.