Tras casi cuatro meses de haber llegado al poder Costa Rica, Rodrigo Chávez, ya hay protestas en su contra por una propuesta de reforma al presupuesto constitucional al sector educación, en el que pretenden reducir hasta un 23% a partir de 2023.
La propuesta desencadenó un sinnúmero de protestas pacíficas de estudiantes y docentes que se oponen a la reducción el presupuesto de las universidades públicas.
Los manifestantes realizaron una caminata desde la Universidad de Costa Rica hasta la Casa Presidencial.
La presión de las protestas generaron que el gobierno de Chávez iniciaran un proceso de negociación entre los rectores de las universidades públicas, la ministra de Educación, Anna Katharina Müller, y el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, en el que acordaron la intención del gobierno de desistir a la reducción presupuestaria del Fondo Especial de Educación Superior (FEES).
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En la negociación las bases acordaron mantener el presupuesto de 2022, para 2023 que corresponde a más de 829 millones de dólares.
El gobierno de Chávez había anunciado que la medida se debía a que el país está atravesando por problemas financieros, pero los rectores de las universidades manifestaron que el recorte provocaría un gran golpe a las instituciones.