Luego de varios meses que se conociera que Rusia envió un grupo de mercenarios para asesinar al presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, el empresario cercano al Kremlin Yevgeny Prigozhin reconoció haber creado una organización paramilitar llamada Wagner para este fin.
La agrupación fue creada en 2014 y luego ser enviados a las zonas separatistas prorusos, Donetsk y Lugansk para combatir contra los ucranianos e independizarse de Ucrania.
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El empresario aseguró que esta organización de mercenarios fueron capacitados y también enviados a países aliados como Siria, África Central, Venezuela, entre otros, para brindar apoyo militar y asistencia a la “seguridad” de estos naciones en dictadura.
“Y ahora una confesión, estos chicos, estos héroes, defendiendo al pueblo sirio, a otros pueblos de países árabes, a los despojados africanos y latinoamericanos, se convirtieron en un pilar de nuestra patria”, afirmó el empresario ruso.
Cabe mencionar que un grupo de mercenarios de Wagner residen en Venezuela, hasta la fecha, para proteger los bienes rusos como la empresa Rosneft y otras empresas de la explotación de oro.
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Prigozhin ha sido acusado por varias potencias occidentales de financiar a esa agrupación paramilitar, a pesar que el Kremlin ha desmentido todo vínculo con esta organización.
Actualmente, hay presencia de mercenarios rusos en al menos 30 países de cuatro continentes, incluyendo Nicaragua, bajo la figura de una creación de una base militar.