Desde 1979, a partir que el Frente Sandinista se tomara el poder y sacara a la familia Somoza, Nicaragua se ha convertido en una guarida de corruptos y criminales buscados y acusados por diferentes delitos por los Estados Unidos.
En la última década, el dictador Daniel Ortega ha beneficiado a través de la Dirección de Migración y Extranjería la nacionalidad a más de una decena de criminales buscados por los Estados Unidos, sumando este 29 de octubre, una de las hijas de Adli Musa Farhood, el empresario jordano, quien también se le otorgó la nacionalidad el 26 de abril de 1990 en medio de piñatería por el FSLN que por décadas ha sido desapercibida.
La hija del acusado por los Estados Unidos de lavado de dinero, contrabando y tráfico de personas, es la ahora ciudadana SOZAN ADLI MOSA SAED, quien fue oficializada este viernes por el diario La Gaceta.
Más voces diplomáticas se unen para desacreditar proceso electoral
En abril de 2011, el antiguo embajador de Estados Unidos en Nicaragua, Paul Truvelli, señaló a Adli Musa Farhood de ser uno de los 6 empresarios palestinos que viven en Nicaragua, enriqueciéndose a través de negocios ilícitos y de ser uno de los líderes de la comunidad musulmana encarga de financiar a grupos violentos, por no llamarlos terroristas, como el “Movimiento Hamás”, según una investigación realizada por el extinto Nuevo Diario.
Además, el antiguo embajador estadounidense acusó a este grupo de criminales de estar abiertamente vinculado políticamente y en negocios ilícitos nada más y nada menos que con el règimen Sandinista de Daniel Ortega, en un informe enviado al departamento de Estado del país norteamericano en 2006.
“El diplomático estadounidense aseguró, además, que estos empresarios palestinos mantienen buenas relaciones con el FSLN y con el Partido Liberal Constitucionalista, y que utilizan las relaciones políticas para evadir pagos de impuestos y evitar inspecciones”, detalla la investigación.
El mismo caso de Venezuela
Cualquier parecido es pura coincidencia. Hace pocos días salió a la luz un caso simiflar en Venezuela, en el que señalan a Nicolás Maduro de refugiar a un grupo de terroristas libanés respaldado por Irán.
Grupo de hackers revela que Nicolás Maduro refugia a grupo terrorista en Venezuela
La noticia fue dada a conocer por un grupo de hackers que intervino la base de datos de la Inteligencia militar del régimen de Maduro, revelando la abierta relación que este tiene con el grupo terrorista, quienes entraron al país en concepto de estudiantes de español bajo la cobertura de programas gubernamentales de estudios de idiomas.
Este grupo de terroristas so acusados de ser agentes de crimen organizado, involucrado en el tráfico de drogas y armas, así como el lavado de dinero en cooperación y respaldo del narcotraficante Nicolás Maduro para el financiamiento del terrorismo.
Asilados en medio de la piñatería por el Frente Sandinista
Entre los casos más sonados de criminales acusados por los Estados Unidos y se le han dado la ciudadanía nicaragüense, ha sido a la Mauricio Funes y su familia, ex presidente de El Salvador, buscado por enriquecimiento ilícito y ha Salvador Sánchez Cerès y su familia, ex presidente y vicepresidente del mismo país.
Pero cabe señalar que, según el libro “Le gran Piñata Vendepatria”, el règimen Sandinista de Ortega, “13 de septiembre de 1979 al 30 de junio de 1981, la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional otorga la ciudadanía nicaragüense a quince personas”.
El 12 de noviembre de 1981se aprueba la Ley de Nacionalidad y al año siguiente, en la derrota del FSLN en las elecciones del de 1990, el Ministerio del Interior a través de la Dirección de Migración y Extranjería otorga la nacionalidad nicaragüense a 241 persona.
Y en 1990 en el nuevo “gobierno de doña Violeta de Chamorro, el Ministerio del Interior sandinista a través de la Dirección de Migración y Extranjería sandinista otorga la nacionalidad nicaragüense a 972 personas. Cada una paga doscientos mil córdobas -para un total de 194,600,000.00 córdobas depreciados de entonces – además de las inevitables jugosas mordidas que muchos deben haber pagado y que no aparecen en La Gaceta”.