El medio de comunicación The New York Time reveló que Laureano Ortega, hijo de la pareja dictatorial del Frente se Sandinista, intentó sostener un encuentro con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, para rogar sobre el cese de las sanciones contra el régimen de sus padres porque aparentemente están teniendo un fuerte efecto negativo.
De acuerdo con el reporte, Laureano se acercó silenciosamente en marzo pasado en Washington para “reiniciar el diálogo” con el gobierno estadounidense, mientras este se disponía a aplicar severas sanciones contra Rusia por su invasión injustificada contra Ucrania.
“Un alto funcionario del Departamento de Estado de EE. UU. fue enviado a Managua para reunirse con Laureano Ortega en marzo, pero la reunión nunca se llevó a cabo porque los Ortega aparentemente se acobardaron”, dice el reporte.
En el reporte, revelaron que uno de los objetivos principales del acercamiento a Washington por Laureano Ortega, era ofrecer la liberación de los presos políticos a cambio de aliviar las sanciones impuestas por la gran potencia, pues todo el círculo íntimo del caudillo Sandinista, se encuentran en la lista negra de las personas más corruptas, así como sus empresas acusadas de lavado de dinero.
Según un funcionario estadounidense, dijo al medio que otro posible motivo del acercamiento de Laureano, se debe a que la cúpula Sandinista se encuentran altamente preocupados por el aislamiento a uno de sus principales aliados de armas, en referencia a Rusia, pues las sanciones impuestas a esta nación alcanzarían y afectaría directamente a la dictadura Sandinista.
A pesar que Rusia no figura como uno de los principales socio comerciales de Nicaragua ya que su aporte es realmente diminuto, las sanciones a Moscú y los embargos de los activos de sus bancos, alcanzaron los miles de millones de dólares que Ortega confió a bancos rusos para evadir las sanciones, están totalmente retenidos.
“Una conclusión clave de este alcance es que las sanciones de EE. UU. a Nicaragua claramente tienen la atención de la familia”, dijo Dan Restrepo, exasesor de seguridad nacional para América Latina durante la presidencia de Barack Obama, cita el medio.
De acuerdo con el funcionario del Departamento de Estado que habló sobre el tema, aseguró que Laureano se acercó a Washington con la ayuda del ahora exembajador de la dictadura, Francisco Obadiah Campbell Hooker, cuando este fue nombrado para el puesto.