En su homilía del domingo 22 de octubre, el obispo auxiliar de Managua, Nicaragua, Silvio Báez, pronunció un discurso contundente desde la parroquia de Santa Ágata, en Sweetwater, Florida, Estados Unidos, donde actualmente se encuentra exiliado. Durante su mensaje, el obispo Báez hizo un llamado enérgico a la comunidad a no aceptar la voluntad de un tirano como ley. Esto se refería directamente al dictador Daniel Ortega de Nicaragua, cuyo régimen ha sido objeto de críticas y preocupaciones en relación con el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales.
El obispo Báez, con gran valentía y determinación, destacó que el miedo no debe hacernos creer que los dictadores de hoy en día son seres invencibles. Enfatizó la importancia de no permitir que el temor paralice nuestras acciones y nos impida luchar por la justicia y la libertad.
Además, el obispo instó a todos los presentes a exigir el respeto de todas las libertades y derechos fundamentales. En un contexto en el que las voces críticas y disidentes a menudo se ven silenciadas o reprimidas, el llamado del obispo Báez a alzar la voz y defender los valores democráticos es de suma importancia.
Es importante destacar que la figura del obispo auxiliar Silvio Báez ha sido reconocida tanto dentro como fuera de Nicaragua por su incansable lucha a favor de la justicia social y los derechos humanos. Su valiente postura en contra de la opresión y la dictadura ha sido un faro de esperanza para muchos nicaragüenses que anhelan un cambio positivo en su país.
Como periodista, es fundamental informar y difundir este tipo de mensajes que promueven la justicia, la libertad y los valores humanos. La valiente intervención del obispo Báez nos recuerda que la lucha por la libertad y la dignidad humana es un compromiso constante que requiere el apoyo y la participación de todos.