Este viernes 11 de marzo el izquierdista Gabriel Boric, recibió la banda presidencial de Chile rodeado de diplomáticos de varios países que ven hacia la izquierda, incluido los exguerrilleros de la dictadura Sandinista, el criminal de lesa humanidad Sergio Ramírez y Gioconda Belli.
En su breve discurso, Boric prometió supuestamente “dar lo mejor de nosotros para estar a la altura del desafío”.
Boric, a quien medios internacionales lo califican como el de la “nueva izquierda”, pues se ha dado a conocer como el héroe de Chile que cambiará la historia y el rumbo del país, a pesar de la crisis económica y migratoria que han obligado a muchos a huir de su tierra por la falta de empleos y oportunidades.
Así mismo, Boric toma el poder en medio de polémicas por sus ideologías radicales e izquierdistas, como el escribir una nueva constitución, la despenalización del aborto, el matrimonio igualitario y un supuesto gobierno de “igualdades”.
Es decir, la “nueva izquierda” que promueve Gabriel Boric junto a otros izquierdosos como Gioconda Belli, es totalmente violenta, pues apoyan la matanza de bebés y la destrucción de diseño original de la humanidad.
Belli, que asistió a la investidura, deseó que esa “nueva izquierda” se expanda por toda Latinoamérica “porque necesitamos esa nueva izquierda”.
La también izquierdista y criminal de lesa humanidad, dijo que ser invitada de Boric es un “desmarcarse de la política opresiva, dominante y represiva que está llevando Daniel Ortega en Nicaragua”, pero no recordó que ella fue parte de esa misma política en los años 80 cuando participó en el asesinato de su mismo pueblo.